#5 Un trabajo con FLOW
Soy Kike Bou, People Director en Hubtype.
Te doy la bienvenida a mi newsletter, un espacio donde trato de convertir mis experiencias en el mundo de las organizaciones, las investigaciones y los libros que leo, en consejos y buenas prácticas sobre liderazgo en la empresa, que puedan inspirar y ayudar a crecer profesionalmente a quien los lea.
Una violonchelista acaba un concierto entre lágrimas y sonriendo. Un escalador pende de solo dos de sus dedos cuando escala una pared lisa, mientras es consciente de cada grieta en la roca. Un cirujano utiliza su bisturí de manera milimétrica, mientras todo a su alrededor se desvanece. Un niño da sus primeros pasos y experimenta una ilusión incomparable. Un surfista se desliza sobre una ola, y tabla y cuerpo parecen fundirse como una sola cosa. Un científico entra en su estudio y sin darse cuenta, se olvida de alimentarse y de que ya es de noche...
Todas estas personas están experimentando “experiencias óptimas” que les causan un disfrute superior y que recordaran por el resto de su vida. No solo eso, gracias a estas experiencias, estas personas obtendrán el estímulo necesario para buscar nuevos retos y desarrollar una personalidad auténtica.
En su libro “Fluir” (“Flow”), Mihaly Csikszentmihalyi aborda la relación entre las experiencias óptimas y la calidad de vida. Su teoría dice que el flujo, también conocido como "la zona”, es el estado mental operativo en el cual una persona está completamente inmersa en la actividad que ejecuta. Se caracteriza por un sentimiento de enfocar la energía, de total implicación con la tarea, y de éxito en la realización de la actividad. Los participantes de su estudio, definían estás experiencias como una corriente que les empujaba hacia delante.
Existe una diferencia entre estar comprometido en una actividad, proyecto o trabajo y tener una experiencia memorable. Puedes estar comprometido haciendo una tarea pero puedes no estar teniendo la mejor experiencia realizándola, y como hemos visto antes, son las experiencias positivas las que permanecen en la memoria, nos hacen crecer y decidir.
Releyendo el libro de Mihaly me di cuenta que muchos de los aspectos que trata en su estudio, están íntimamente relacionados y pueden aplicarse para mejorar la experiencia que tienen los empleados en su día a día en el trabajo.
¿Qué características deben de tener las experiencias óptimas?
"A diferencia de la simple experimentación del placer, cuyo disfrute es instantáneo y puede lograrse sin mayor esfuerzo, la experiencia óptima requiere una atención totalmente concentrada que genera un movimiento hacia delante, capaz de re-configurar la conciencia y crear orden en ella. Cuando alguien ha optado por una meta y se involucra en ella hasta los límites de su concentración, cualquier cosa que haga le resultará agradable”
Mihay nos dice que para que se den este tipo de experiencias, deben cumplirse algunas características que, estoy convencido, podemos tomar en cuenta para trasladar al trabajo. Las experiencias óptimas requieren de…
Desafío que requiere habilidades: ¿Cómo podemos desarrollar en modo continuo a los colaboradores ofreciéndoles desafíos que hagan que tengan que trabajar en sus competencias?. Eliminar por ejemplo tareas repetitivas a través de la digitalización, es una buena manera de que los colaboradores solo tengan que hacer tareas que requieran de un cierto desafío, de lo contrario, el aburrimiento puede aparecer y arruinar la experiencia en el trabajo.
Concentración y enfoque: ¿Cómo es el entorno de trabajo?, ¿los colaboradores disponen de los espacios adecuados para cada tipo de tarea?. El trabajo no es lineal y uniforme, hay empresas que teniendo en cuenta que cada tipo de actividad requiere de una espacio distinto, han diseñado sus oficinas, ¡con mas de 20 espacios distintos!
Metas claras: Esta característica de las experiencias óptimas, podemos trasladarla a la empresa preguntándonos si los colaboradores tienen claro en su día a día, cuál es la visión, misión valores, los objetivos de la empresa y los suyos propios. ¿Cómo saben los colaboradores hacia donde se dirigen?, ¿cómo sabrán cuando estén allí?.
Feedback constante y casi instantáneo: Para seguir progresando y disfrutando de su trabajo, los colaboradores necesitan de feedback constante; ¿es la evaluación de desempeño anual la mejor forma de dar feedback?, ¿están los managers de tu organización preparados para actuar como coches y mentores?.
No hay lugar para otras informaciones: Comunicar más pero también comunicar mejor. Para ayudar a crear experiencias óptimas en el trabajo, la cantidad y la calidad de información que obtienen los colaboradores debería ser la que les ayude a hacer bien su trabajo.
Un sentimiento de control personal sobre la situación o actividad. Me encanta esta característica que Csikszentmihalyi atribuye a las experiencias óptimas, porque podemos traducirla viene a la autonomía de la que deben disponer los colaboradores en la organización para que su trabajo sea satisfactorio.
Vivimos en la era "experiencial" en el trabajo
Como Mihaly explica en su libro, una vez resueltas las necesidades básicas como son el alimento, el cobijo y los deseos sexuales, las expectativas de las personas se incrementan y surgen nuevas necesidades. Si trasladamos este razonamiento a como las organizaciones han cubierto las necesidades y expectativas de los empleados, tendríamos un esquema parecido a este:
Las organizaciones han ido adaptándose y cubriendo las expectativas y necesidades de los trabajadores ha medida que la sociedad ha ido cambiando. Desde la mera visión del trabajador como un recurso en una línea de producción, al momento actual donde la visión de las personas en la organización está cambiando a una que entiende que la vida y el trabajo es algo que está conectado. Si las personas no están bien en su vida, eso afectará al trabajo. Si no están bien en el trabajo, esto afectará a sus vidas personales.
Desde las organizaciones, trabajando con los colaboradores, debemos asegurarnos que cada momento se convierte en algo significativo y de impacto, porque en todos esos momentos, los colaboradores estarán experimentando como es realmente la organización y formando sus propias percepciones sobre la misma.
Cuando lleguen los momentos de "la verdad" donde los colaboradores tengan que tomar decisiones, irán a su memoria para hacerlo; ¿debería “darle” más a esta organización?, ¿debería quedarme aun cuando me ofrecen más dinero en otro sitio?, ¿debería continuar siendo parte de viaje y misión con esta organización?. Será en estos momentos donde las experiencias óptimas marcarán la diferencia.
Gracias por leer Pausa para el café.
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